De repente, nos hemos vuelto a ver envueltos en el habitual torbellino de premios cinematográficos, esta vez aderezado con PCRs. HHS al canto.

Los Forqué abrieron camino en enero. ¡Qué lejos queda ya el mes de enero! Hicieron una gala presencial, al estilo clásico de toda la vida y «Las niñas» de Pilar Palomero empezó un recorrido triunfal, película que, recordemos, antes de su Biznaga de Málaga abrió itinerario en Berlín, cuando aún se podía volar con tranquilidad. Su productora, Valérie Delpierre, se ha convertido en la señora elegante, en el vestir y el decir, que recoge el último premio.

Un nombre, Patricia López Arnaiz, protagonista de “Ane”, empezó a sobresalir y a sonar en cada convocatoria, una actriz que, cerca ya de los cuarenta, recoge frutos de años preparándose para ello. El primer premio que le llegó fue el de «El Ojo Crítico», el programa cultural por excelencia de la radio, y entró en la rueda de la fortuna. La hemos ido viendo en la película de Amenabar “Mientras dure la guerra”, como hermana de Unamuno, o en «Uno para todos» de profesora, enamoriscando a David Verdaguer, pero con «Ane» y esa madre que descubre que no conoce a su hija ha llegado su momento.

Premios Forqué 2021. Patricia López Arnaiz.

Salvo alguna excepción, donde se ha impuesto la gracia y el talento de Javier Cámara, Mario Casas se ha convertido también, a golpe de premios, en el hombre del año. Ha arrasado, se ha emborrachado de reconocimientos y eso que se le resistían porque podían haberle llegado antes con «El fotógrafo de Mauthausen«, pero ha tenido que vencer muchos prejuicios. Hasta la crítica se ha rendido a sus pies, le han caído el Sant Jordi y el Feroz devorados esta vez por la polémica de Victoria Abril y sus teorías negacionistas. Por fin logró su Goya el niño bonito, aunque en un año tan especial no pudiera recogerlo hasta días más tarde. Y sí, llegamos a los Goya, reino de Antonio Banderas que cumplió su sueño de ser el anfitrión en su teatro del Soho de su Málaga natal. El malagueño más universal después de Picasso, con sus aires hollywoodienses, convocó a sus amigos y, jugando con paneles, ofició la ceremonia con una gran solemnidad. Pero el momento para la historia, el minuto de oro, se lo llevó Ángela Molina, señora de los pies a la cabeza. No hay mejor manera de agradecer un premio que recordar, como hizo ella, que en el cine, como en la vida, no somos nadie sin los demás. Además, todo en ella suena auténtico. Aún recuerdo su mensaje en plena naturaleza de su isla de Ibiza cuando le dimos online, en 2020, el Sant Jordi de Honor, qué preciosidad.

Premios Feroz 2021. Mario Casas.

El crucero ha tenido la siguiente parada en los Gaudí de hace un par de semanas. Aunque «Las niñas” volvieran a imponer su criterio y la exquisita «My Mexican Bretzel» de Nuria Giménez Lorang fuera otra de las triunfadoras de la noche llevándose tres estatuillas, poca carne hubo en el asador del cine catalán. El empuje de los chicos de “Les dues nits d’ahir” les llevó a movilizar para ganar el premio del público, una película que se acaba de estrenar. Suerte que nos quedaba “La vampira de Barcelona”, una cinta cuyo productor Raimon Masllorens se encargó de recordar al recoger el Gaudí a la mejor película en lengua catalana, que no ha estado ni en pintura en ninguno de los otros premios, siendo una película muy digna de Lluís Danés con un sentido artístico fuera de lo común y con un star system del que podemos estar orgullosos, de actores y actrices que te dejan bien en la alfombra roja. La presidenta Isona Passola se va con la cabeza alta, insistiendo a los políticos, con su tozudez habitual, que tienen que ayudar a remar inyectando dinero al cine, pero el panorama es duro. Visto lo visto, en un año que nadie niega que todo es más difícil, la persona que entre ahora a presidir la Academia debería abrir reflexión pendiente sobre el cine catalán. ¿Qué somos? y ¿a dónde queremos ir?, dos preguntas que exigen respuesta urgente si de verdad queremos avanzar.

Premios Gaudí 2021. Equipo de “La vampira de Barcelona”.

En esta agitada primavera, porque cada noticia es más sorprendente que la anterior, los Premios Sant Jordi de Cinematografía que avala RNE cumplirán sesenta y cinco años de historia el próximo diecinueve de abril, un premio combativo y guerrero como pocos con unos críticos catalanes capaces de darle premio a Mejor Película Española al documental de Luis López Carrasco «El año del descubrimiento», y vaya si ha sido un descubrimiento esta película que apela a la doble moral. Pocos días después, el veinticinco de abril, los Oscars®, siempre tan esperados aunque algunos los detesten, rematarán y pondrán punto final a la temporada de premios. El top del top. Unos Oscars que este año abren definitivamente las puertas y compuertas a las mujeres, que pueden volver a hacer historia, y a los afroamericanos, que mira que han tenido paciencia en Estados Unidos. Una edición en la que veremos si «Mank«, y toda la carga cinéfila que lleva esta película de David Fincher, puede o no con la humanidad de «Nomadland«, la brillante película de Chloé Zhao, León de Oro en Venecia, con una Frances McDormand inmensa, una actriz muy Coen, que nunca dejará de sorprendernos.

Conxita Casanovas. Periodista especializada en cine, trabaja en RTVE. Acumula mucha experiencia. Ha recorrido los festivales más importantes y ganado importantes premios pero conserva la ilusión y la pasión del primer día. Dirige el programa ‘Va de cine’ que suma ya 37 temporadas en antena en RNE-Ràdio 4 (domingos de 14h a 15h), espacio que tiene una versión en castellano en RNE- Radio 5 (sábados 11.35h) para toda España. Actual directora del BCN Film Fest.