La plataforma adulta de Disney es tímida en series originales y clásicas, pero recupera un amplio catálogo de películas que incluso cuesta encontrar en formato físico.

Star, la plataforma adulta de Disney+, ya está aquí. Y la sensación es un poco la misma que cuando se produjo, hace menos de un año, el debut de la todopoderosa compañía en la guerra del streaming. Por un lado, te das cuenta de que en realidad hay menos contenido del que te esperabas, o como mínimo menos del que hay en otros monstruos como Netflix, pero también de que hay producto de mucha calidad, alguno que hasta ahora era de difícil rastreo, y con copias cuidadas tanto de imagen como de sonido. Lo más curioso del caso es que en conjunto tiene algo de “revival” de los 90: ya sea porque se recuperan unas películas determinadas o por la estética de las series, todo conduce a revivir un estilo de ficción muy propio de aquella década.

«Love, Victor».

Por lo tanto, el balance es claramente positivo, con algunas contraindicaciones. La primera de ellas, la oferta televisiva. De producciones originales de momento han estrenado tres. “Helstrom”, una producción de Marvel sobre dos hermanos, hijos de un asesino en serie, que se dedican a cazar demonios, es el paradigma de producto que suena mejor cuando te explican el argumento que cuando lo ves, y tiene toda la pinta de cancelación preventiva. “Love, Victor” es la extensión televisiva de “Love, Simon” y de la novela que la inspiró, y en ella se vuelve a explicar las dificultades de un adolescente para socializar su homosexualidad cuando el entorno da por sobreentendido que es heterosexual. Lo más interesante es que incluye una denuncia antirracista que no estaba en el original, aunque no consigue eliminar la sensación de estar ante una repetición de fórmula. Y finalmente, “Big Sky”, es la más prometedora: un retorno del productor y guionista David E. Kelley a sus esencias (la de los mencionados 90, cuando estrenó series tan reivindicables como “Picket Fences” o “Chicago Hope”) con la historia de dos detectives de Montana en busca de unos secuestradores de mujeres. En cuanto al resto del catálogo de series, lo más destacable es que “Lost” vuelve a tener casa y que las grandes “Buffy” y “Futurama” finalmente están en una plataforma.

«El color del dinero».

Mucho más sugestiva resulta la oferta cinematográfica. Tal y como se había anunciado, Star incorpora películas de las extintas productoras Touchstone y Hollywood Pictures que incluso cuestan encontrar en formato físico. Entre ellas, “El color del dinero”, “Alta fidelidad”, “La última noche”, “El bosque”, “El protegido”, “Good Morning, Vietnam”, “La mano que mece la cuna”, “Life Aquatic” o “Matrimonio de conveniencia”. También cuenta con un amplio repertorio de producciones de la Fox, ahora propiedad de Disney, con títulos como “La profecía” (junto con sus secuelas y el olvidable “remake” de John Moore), “Master and Commander”, “Algo pasa con Mary”, “Titanic”, “Entre copas”, “Moulin Rouge”, “Veredicto final”, “Speed”, “La mosca” o la saga “Jungla de cristal”. Hablando de acción, Star también se convierte en el hogar fijo de las producciones de Jerry Bruckheimer, empezando por “La Roca” y “Con Air” y acabando por “Marea roja” y “Déjà Vu”, de Tony Scott. Todo esto es lo que hay ahora y previsiblemente irá creciendo de forma dosificada pero firme, como ha sucedido con la propia Disney+. El futuro es alentador, y más teniendo en cuenta que los catálogos que tienen entre manos son muy amplios y que, en lo que respecta a las producciones originales, ha quedado claro que no piensan privarse de nada.

Pep Prieto. Periodista y escritor. Crítico de series en ‘El Món a RAC1’ y en el programa ‘Àrtic’ de Betevé. Autor del ensayo ‘Al filo del mañana’, sobre cine de viajes en el tiempo, y de ‘Poder absoluto’, sobre cine y política.